domingo, 30 de septiembre de 2012

..... puedes venir un momento?

Si una de tus niñas (recalco, NIÑA, en femenino, excluyendo los chicos, todos ellos) tiene entre 10 y 14 años, te dice eso desde el baño, con educación (demasiada, se entiende), y con media voz de susurro... Ir preparadas para cualquier cosa.

Cuando leáis esto os pensareis que soy tonta, porque ahora de lejos, una intuye. Pero en el momento, 5 horas enteras de paseo por el monte con las niñas, dos de ellas de 2 y 6 años, intentando cocinar algo decente y con un resfriado del copón, no se te pasa eso por la cabeza. Y que queréis que os diga, con 11 años, en mis tierras una era un poquito precoz. Y entre que yo estaba obtusa y el castellano de las niñas tiene sus limites...

Y voy a contároslo ya, que aun ni sabéis de que os estoy hablando.

Os transcribo el dialogo literalmente, para que no haya confusiones:

NIÑA DE 6 AÑOS: La (niña mayor) dice que si puedes ir arriba.
YO: que baje ella que ahora no puedo.
NIÑA DE 6 AÑOS: Esta en el baño y no quiere.
YO: si voy se me queman las salchichas, no puedo.
NIÑA DE 6 AÑOS: pero dice que es urgente.
YO: (a grito pelado) QUE PASAAAAAAAA????
ELLA: (momento de silencio)... Puedes venir un momento? (momento de silencio).... Por favor?.
YO: no puedo ahora.
ELLA: (momento de silencio)... es muy urgente.
YO: (bastante estañada y cabreada, paro el fuego de las salchichas y me encamino para el baño de arriba, acordándome de la madre de la criatura, y entro al baño). Que pasa?
ELLA: tengo un problema.
YO: yo también, son las 2 y aun no hay la comida echa, ¿que pasa?
ELLA: es la sangre.
YO: Que sangre?
ELLA: la de ahí.
YO: donde hay sangre?
ELLA: ya sabes, ahí.
YO: ahí donde?
ELLA: (señala el baño) Ahí.

Y en un momento se te enciende la bombilla y tu mente te lleva a tus 13 años, y te retumba en la cabeza ese anuncio tan guai de la epoca...



Una que empieza a atar cabos, niña con 11 años, con sangre, ahí, baño, urgencia... la cara pasa de color blanco a verde, de verde a morado, de morado a blanco y dices la genialidad de...

YO: pero ahí... que sale de ahí?

Darme un aplauso. Lo merezco, lo se. Y tres collejas. También me las merezco, me las he ganado a pulso.
Después de semejante genialidad, una se centra, le entra la vena adulta y empieza a informarse a modo rápido para entrar en situación.

YO: pero es la primera vez?
ELLA: si...
YO: y te ha pasado ahora o en el colegio?
ELLA: ahora...
YO: bueno pues no pasa nada mujer, es normal.
ELLA: lo se pero hay mucha sangre, no me gusta la sangre.
YO: (pensando: pues estamos listas...). No pasa nada, que la sangre es muy escandalosa pero no es tanta.
ELLA: creo que mama dejo en el armario de la esquina algo por si pasaba esto.

Voy al armario de la esquina, busco y busco y encuentro un paquete de compresas.

ELLA: y esto como se pone?

Hago una explicación técnica del asunto, en plan "déjame a mi que soy ingeniero"...

ELLA: y cuando me lo quito?
YO: tienes que cambiártelo varias veces al día.
ELLA: menudo rollo...

Y lo que te queda. Eso es lo que pensé  pero puse una sonrisa en la cara, no le vas a contar ahora las maravillas (notese la ironía  de ser mujer, y como acabas queriéndolas taaaaaaaaaaanto cuando van pasando los años.

Y en ese momento oigo un grito abajo seguido de un golpe, le pones una sonrisa y le dices un: "si necesitas algo más me llamas", y vas a pacificar a las otras dos niñas.

Se que son cosas que pasan, pero no se porque me tienen que pasar a mi.

jueves, 27 de septiembre de 2012

This is the end. My only friend, the end.

El fin esta cerca. Ya tengo billete de vuelta a mi tierra. El domingo 16 de Diciembre, por la tarde.
Reconozco que hace una semana y media que tengo esta primera frase escrita y me hice la sueca unos días más, por pereza, y porque aún no quiero entrar en la fase de "esto termina", aunque así sea.

Primero diré que me ha sorprendido gratamente el "éxito" del blog. Cada entrada tiene más de 200 visitas, el récord se la lleva una que tiene 320. Y yo que pensaba que no me leería ni la vecina del tercero...
Y para más inri, parece que la gente lo sigue con devoción bloguera. A algunas os hablo también por foros o por facebook, y aún me sorprende cuando me dicen: "¿Para cuando una nueva entrada? Que hace 8 días que actualizaste por ultima vez, ya va siendo hora.". Mucha gente pensaría que pienso eso de "menuda cansina por Dios". Y la realidad es que lo que se me pasa por al cabeza es un "Ha contado los días que hace que no actualizo... " Y se me queda una cara parecida a esta, frase incluida:


Después veo el mapa localizador de visitas del blog, y me sorprendo al ver que tengo visitas de toda américa latina, de toda la costa de USA, de más media Europa, las Canarias, de algún lugar de Australia e incluso de algún rincón perdido de los Emiratos Árabes. Me pregunto yo que diablos puso en Google esa persona para terminar en mi blog. 

Estos ultimas semanas, la gente que me lee sabe que esta finalizando esta aventura en Alemania. Y todas esperáis con creces a ver como termina esto, como si fuera el ultimo capitulo de Los Serrano. Me han preguntado si podré una foto mía en mi última entrada, que si diré mi nombre, que si diré donde vivo, que si publicare mi correo o mi facebook... 
Y yo, que ando alucinando con todo esto, os lo prometo... publicaré todo eso en mi ultima entrada. Pero hay un problema. Problemilla según se mire. Y es que mi blog no terminará ahora. ¿sorprendidas? No lo creo.

Me quedan muuuchas cosas que contar. Y además, quiero escribir sobre el regreso (nadie lo hace!). Y os diré un secreto... Mi experiencia au pair no acaba aquí: tengo otro destino en mente, que está un poco más lejos y cruzando un "pequeño" charco. No será ni ahora, ni en tres semanas, ni en seis meses, pero llegará. Y eso también os lo tendré que contar. 

También debo decir que este blog me ha llevado a conocer mucha gente maravillosa más allá de la pantalla (vamos, en carne y hueso), cosa que agradezco muchísimo. 

Ahora que ya ha quedado claro que esto no se acaba aquí, que aun quedan muchas cosas que contar y que tendréis que aguantarme todavía unos meses más, me vuelvo al principio. Ya tengo billete de vuelta. 

Estoy escribiendo otra entrada sobre que ocurre cuando ya tienes fecha de vuelta. Es una mezcla de sentimientos muy rara, con lo cual quiero contar eso con más calma.

Así que nada más por hoy. Solo quería deciros que ha empezado el principio del fin de mi primera (yo se que no sera la ultima) aventura en Alemania. Y quería daros las gracias a todas y cada una de esas más de 10790 personas que se han pasado por aquí y me han dado ánimos, a esas que se han animado a ser au pairs después de leer este blog, y al contrario, a las que han decidido no ir precisamente por leerlo, y aun así han seguido pasándose por aquí, a esas a las que el blog las ha ayudado en algo o simplemente a las que se pasean por este blog por leer algo ligero que ojala les haya sacado una sonrisa. 

martes, 25 de septiembre de 2012

El tonto de la familia


Es de sobra conocido que en todas las familias hay un tonto. Todos sabéis cual es el tonto de la vuestra, estoy segura (que si la tía, el novio de, la prima...).
Aquí en Alemania, también tengo un tonto en mi familia. Es rubio platino, 46 kg (pesado ayer), todo cachas... cuatro patas y mucho pelo. Si, es el perro.

¿ Habéis leído el libro de "Marley y yo", de John Grogan? Si la respuesta es que no, leerlo: no tiene perdida. Si la respuesta es que si, el mío o es su hijo, o su primo, o su hermano: y por supuesto, lo supera en estupidez.

Y es que la naturaleza decidió que naciera allá por el 2007, en algún sitio perdido de América Latina, un perro cruce de sabe-Dios-que, y como la naturaleza es sabia, creó un perro precioso a la vez que temible: tamaño de mastín, pecho y boca de pitbull pero con tamaño de dogo argentino, fuerza de toro... Pero como he dicho, la naturaleza es sabia, y después de crear semejante monstruo, debería pensar algo así como "pobrecito, nadie lo querrá jamás con estas pintas", así que recubrió todo eso con un disfraz de labrador: pelito corto y rubio, cara de buenazo, orejitas caídas, pliegues de piel... Y como de esa mezcla solo le salían 700 gr de perro (el peso que tenia cuando lo adoptaron hará unos 5 años), le añadió progresivamente y mientras crecía (y crecía y crecía y no paraba de crecer para horror de la familia) toneladas del don de la paciencia. Jamás he visto a un perro tan paciente, educado y respetuoso con los niños, adultos y otros animales.

Y la naturaleza es sabia pero comete errores (el ejemplo más conocido por los biólogos es el uno llamado "Belén Esteban"), se olvido de ponerle algo sumamente importante a este cánido: un cerebro que le funcione y un pelín de inteligencia.

Porque no lo puedo decir de una manera mas suave: este perro es más tonto que escupir para arriba y ponerse debajo. Y en mi defensa diré que tengo pruebas:

Este es su primo hermano seguro...
1- Es el único perro que conozco al cual le haces el truco de no-te-tiro-la-pelota-pero-como-si-si, y se va corriendo a buscarla... pero no regresa. La sigue buscando y buscando. Y cuando ya te da demasiada pena, lo llamas, le enseñas la pelota... la huele y se va a seguir buscando, con cara de felicidad y pensamiento de "gracias colega, ahora se que tengo que buscar una como esa".

2- Es el único perro el cual cree que si va corriendo y se estampa contra la puerta del jardín, esta se abrirá por arte de magia.

3- Es el único perro de 45 kg que conozco que le tiene miedo a gatos que se cuelan en el jardín de casa (que con medio bocado se los merendaba).

4- Es el único perro que le tiene pánico a las moscas. A LAS MOSCAS.

Entre otras cosas.

Y no os creáis, el usa eso de ser "el tonto de la casa" para hacerse el tonto como el que más: que si ahora te miro con cara de yo-no-entender-tu-decirme mientras le dices que saque su cabezota de tu pierna mientras comes, que si ahora me hago el sueco mientras robo un cacho de manguera delante de tu cara, que quizá si lo hago despacito no te das cuenta...

Pero como os vengo diciendo, es todo bondad. Su rango más alto de agresividad es el del ataque de la baba.
Aun así su inteligencia a veces ha rozado limites insospechados de gilipollismo. Una vez, en enero, tubo la genialidad de echarse al río del parque. Estaba helado. Se tiro de plancha. No contento con el ostión, decidió que de ahí, a pesar de no haber agua, siempre la había habido y por tanto eso se bebía. Resultado: yo haciendo equilibrismo encima del río helado (como detalle, calzando unas converse, de suela de goma, que resbala "poquito"), al encuentro de un perro que pedía a gritos la libertad (literalmente), mientras su lengua estaba pegada al hielo y su cuerpo espachurrado encima. Me llegan a ver los de Jackass y me contratan.
También puedo recordar una vez en el parque de perros, jugando con unos... y de golpe ve a un chihuahua meando en un árbol. A el se le salen los ojos de las órbitas, se va corriendo hacia el como alma poseída por el diablo, llega hasta el otro perro, se para en seco... Pero ya os he dicho que este perro es todo bondad. Así que lo único que hizo fue levantar la pata y mear donde lo había echo el otro perro. Ah! lo olvidaba: el otro perro aun estaba ahí. Efectivamente, lo duchó. Yo lo vi todo como en cámara lenta, siendo incapaz de procesar lo que estaba pasando. Por suerte los demás ni siquiera miraban. Lo peor fue cuando el dueño del otro perro se fijo que el suyo iba todo mojado y pidió a ver si alguien tenia una toalla. Si, le dejaron 3. Yo ahí opte por mi perfil de "Yo no soy de aquí, no entiendo nada", y guardé mi toalla como oro en paño.
Y os podría contar también la vez que se metió en la cama elástica y no podía salir y acabo saltando fuera por encima de la verja, o la vez que uso el manzano recién plantado de "palo con el que jugar"... y un largo etc.

Como curiosidad os diré que este perro fue rescatado de una tienda de América Latina por mi familia de aquí  donde lo tenían muriéndose de hambre porque la madre "no quería darle leche", y lo tenían ahí en una jaula a la espera de la muerte. Solito y con una semana de vida. Gracias a Dios que su inteligencia limitada le ha echo olvidar la maldad de la gente.

Y a pesar de que cada mañana me chupe los pies, que compita con las niñas para ver quien deja mas babas en mi ropa, que si quiero ponerme pantalones negros tengo que salir a la calle en bragas, y ya si eso ponérmelos ahí para que no se queden peludos... es mi chiquitín y lo quiero muchísimo, y lo echaré de menos.

Porque a pesar de no estar en mi contrato, yo soy au pair de tres niñas y un perro.

jueves, 20 de septiembre de 2012

Esas pequeñas cosas de au pairs.

Todas las au pairs de este mundo hacemos cosas similares que nos caracterizan. Todas. Independientemente de su nacionalidad, edad o sexo. No se libra una (y si os librais de todas es porque algo, algo gordo seguramente, estais haciendo mal).
Ya he hablado anteriormente de la tendencia a parecer un orco, asi como de los métodos educativos alternativos. Estas que explicaré ahora son cosas más sutiles, pero que demuestran que eres au pair, para bien o para mal.
Siendo asi, voy a dividir esto en apartados:

Au pairs con niños de 0 a 2 años:

- Hablar como si estuvieramos con una sobredosis de... de imbecilidad, porque no tiene otro nombre. Ya sabeis, poner voz de gilipollas y decir cosas de un nivel educativo cual, que haria levantarse de la tumba a la propia Maria Montessori. Lease los tipicos: "Que mi bebiiiiiitoooo se rieeeeeee??!!, que mi bebitooo se riiiiiieeeee??!! Ay!! que te como la nariz!!". Ya sabeis, esas cosas.

- Creer en Dios. Ninguna au pair que se precie puede entender ni dar una explicacion cientifica a porque de un cuerpo tan pequeño, salen tantos residuos, de cualquiera de sus agujeros.

- Recogerse el pelo asiduamente. Si una au pair llega a su nueva familia con el pelo suelto, y a la semana ves que su coleta esta ahi en estado permanente sea la hora que sea y bajo cualquier circumstancia, es porque tiene un niño de esa edad, que ya sabemos las ganas que tienen de imitar Tarzan con tu pelo.

Au pairs con niños de 2 a 4 años: 

- Llegar al curso de idiomas, fiestas, salida de fin de semana o cenas, con detalles decorativos sutiles asi como tiritas con dibujos de piratas o de Bob esponja (y si no hay tanta suerte de Dora la Exploradora), con rayones de color verde en el brazo, que empiezan a la altura de tu cuello y terminan donde la uña del dedo meñique, pulseras de cuentas gigantes en forma de corazón, collares de macarrones... Esas pequeñas cosas.

- Cosas impensables de reconocer (por eso de tu perdida inmediata de la dignidad) antes de esta experiencia, como llegar a decir publicamente que has comido sopa con pasta en forma de dinosaurios a la triste edad de 20 años (elegida, comprada y cocinada por ti), o meterte en una piscina de bolas (de lado, claro esta, que de frente no cabes) y disfrutar más que las niñas...

- Ser capaz de convertirte en la mujer araña, con 8 brazos. Esta habilidad se adquiere o bien comiendo al lado de la criatura... o cambaindo pañales: con una mano se sujeta la criaturita, con otra sus manos para que no le de por tocarse donde huele que alimenta, te fabricas una mano a lo Robocop para limpiar culos y aun te sobran extremidades para sujetar toallitas, pañales y posibles objetos arrojadizos de las cercanías.

- Buscar en Youtube y escuchar canciones infantiles por voluntad propia. Y dice esto una que mientras escribe esta entrada se inspira escuchando esto y esto. (y se que un alto porcentaje de los que leéis esta entrada habéis dejado la canción después de darle al link... y si no lo habéis echo es que no tenéis corazón).

Au pairs con niños de 4 a 8 años:

- Tu habitación parece un expositor de manualidades regaladas. Muchas fabricadas o ideadas por ti. 

- Eres un experto en vocabulario estudiantil: que si Kinergarten por aquí, que si Grundschule por allá, que si la radiergummi en forma de fisch, que si la Frau SabeDiosQue (sabes que jamás de los jamases lograrás decirlo bien), que si la Rucksack extraña todoterreno marca Scout (algunas me entenderéis, lo sé), que si los Hausaufgaben y los ya famosamente conocidos libros de Leselernen.

- Las horas, el alfabeto, así como el vocabulario matemático básico (todo esto en alemán) y el uso de plumas (que aquí los niños escriben con pluma, tocatelos), deja de tener secretos para ti.

- Descubres la capacidad alemana de asalvajar a los niños en el Kindergarten, y te vuelves suma domadora de malas actitudes que de ahí te traen.


Au pairs con niños de 8 a 14 años:

- Como buenos preadolescentes porculeros, tu actitud muchas veces no es de au pair: es de sargento del ejercito. Cambias el "Bitte (...)" a todas horas por el "Du muss JETZT (...)".

- Deseas la muerte con sufrimiento repetidas veces de los amigos de tu niño cuando vienen a casa. Con demasiada frecuencia. Varias veces por minuto.

- Pasas momentos por los que no estas preparada moralmente: no reírte cuando te hablan del "novio", explicación técnica del uso de una compresa porque a la niña le ha venido la regla y eres la única adulta responsable en el momento en casa (tengo que hacer una entrada de esto...), miraditas cómplices sobre el uso familiar no aprobado de la sanwichera, intentos de soborno para evitar el chivatazo paterno... Esas cosas que no sabes si ir contra el enemigo o unirte a él (sobretodo si el soborno es suculento).



Veréis que teniendo una niña de 2, una de 6 y una de 12, mi vida es una fieshhhhhhta continua, y sin fin.

sábado, 8 de septiembre de 2012

¿¿Waruuum??

Puedo afirmar que la etapa del "NOOOOOOOOO" en mi niña pequeña esta superada.
Ahora estareis pensando: que bien, que alegria, que bien debes estar ahora... Verdad?. Pues para nada. Ahora es peor.

Hemos llegado a la etapa del "Warum??", lease, la del "Porque?". Y ya no puedo más. Ahora las conversaciones son así, todas:
YO: Tienes que comer más espaguetis.
ELLA: Waruuuum?
YO: Porque no has comido apenas.
ELLA: Waruuuum?
YO: Porque no quieres abrir la boca.
ELLA: Waruuuuuum??
......

Y así seguimos. Encima no dice un seco "Warum?", no no, que va, lo dice como con musiquita, en plan "Waruuu(subimos una octava) uuu (bajamos una octava) uuuum?", lo que me saca de quicio de una forma impensable. Voy todo el dia con el "warum" en la cabeza.

Pero me he dado cuenta de que ya lo dice por método, ni siquiera escucha lo que le estas diciendo. Así que el otro día ya estaba tan harta de warum warum warum warum warum a todas horas, que sin comerlo ni beberlo, encontré la solución a tanto warum. Así fue la cosa:

YO: Por favor deja de gritar.
ELLA: Waruuu uuu uuuuum?
YO: Porque me molesta.
ELLA: Waruu uuu uuuum?
YO: Porque no me gusta que chilles.
ELLA: Waruuu uuu uuuum?
YO: Porque el sonido de tu voz tiene una amplitud de onda superior y una frecuencia sumamente alta, lo que hace que tu voz sea especialmente molesta a los oídos de la gente cuando chillas gracias a su alto volumen y tu agudez y cuando estas ondas oscilan cerca de mi tímpano son sumamente molestas e inaguantables, lo que hace que odie con todo mi corazón cuando gritas. Entendido?
ELLA: ........Ja (lease, si, en alemán).
YO: Pues a hablar bajito por favor.

Así que el truco esta en hablar tanto, tan rápido y con palabras tan rebuscadas que se te quede mirando con cara de "que-me-esta-diciendo-esta-loca", y se calle.

A ver lo que me dura el truco, porque ya no se me ocurren explicaciones medio científicas sobre cosas como "porque el agua moja" o "porque al puzzle le falta una pieza".

Dicho esto... darme fuerzas, porque ya estoy desquiciada.
El otro día le dije a mi profe de alemán, mi querida Frau Göerner, que si sabia donde poder hacer una fotocopia por allí cerca, y cuando me dijo como respuesta: "Warum?", se me salieron los ojos de las órbitas mientras me aparecía un tic nervioso y por poco estuve de hacer una matanza al mas puro estilo cowboy con los indios.

Voy a desarrollar un trauma como no le pase rápido esta etapa.

miércoles, 5 de septiembre de 2012

Veo veo... ¿Que ves?

Porque yo no veo lo mismo.
Y eso es el mundo au pair resumido en pocas palabras. La visión de esa maravillosa aventura es muy distinta, según lo vea una au pair o la familia: cada una tiene sus razones y sus prioridades, que son distintas (que no opuestas, sino, mal vamos).
Y hoy, como me aburro mucho desde que solo curro (apenas) 4 horas al día, y repasando para una asignatura de la uni, me he inspirado y he adaptado la ventana de Johari al mundo au pair.
Os la presento:


Me explico, que estareis pensando que me he vuelto loca (más aún). Que quede claro que todas estas cosas, se refieren a cuando la relación familia-aupair es buena.

Lo que se ve

Eso es lo que el mundo en general puede apreciar al ver el conjunto familia-aupair. Una chica feliz que esta aprendiendo un idioma, con una familia feliz porque tienen una chica en casa (encantadora por cierto) que cuida a los hijos como si fueran suyos, y que viven todos cogidos de la mano y queriéndose mucho al más puro estilo La casa de la pradera.
Por si no se ha notado, lo que ve todo el mundo es una gran mentira.

Lo que no ves

De este apartado poco puedo decir. Como au pair que vengo siendo, yo no lo veo. Pero son cosas en las que los padres no están de acuerdo, pero como son "esas pequeñas cosas", hacen ver como que no las ven y, supongo, lo comentan entre ellos, más o menos como hacemos nosotras cuando nos juntamos (entre au pairs, se entiende).
Algunos ejemplos de esto, por ejemplo, pues seria que tu lleves al niño con el carrito  más de lo que ellos creen, o que crean que quizá los niños deberían salir más, o que tu como au pair podrías bajar la basura si la ves delante de la puerta. Cositas así, no me extiendo más en esto.

Lo que nadie ve

Estas cosas son "cositas tontas" que hacen la vida difícil. No son culpa de la au pair ni de la familia, pero por esas cosas de la vida, unos se quejan de los otros y viceversa. Ejemplo: el segundo escalón de la escalera cruje al subir (y cruje mucho), por lo tanto cuando la au pair llega tarde a casa un viernes y no se acuerda de saltar ese escalón, hace un ruido tremendo; por culpa de eso, una niña con sueño ligero se despierta. La au pair se caga en los muertos de la familia por tener un escalón que cruje y la familia se caga en los muertos de la au pair por pisar ese escalón que cruje.
Peeeero, nadie piensa en que la culpa es del escalón, y que arreglándolo se arregla también el problema.

Lo que no ven

He dejado este último apartado para el final con una razón: simplemente porque es en el que más me puedo extender, ya que lo conozco (demasiado) bien. A parte de las costumbres de cada casa, que a pesar de todo, son costumbres y no te puedes meter, yo en este apartado metería lo que los padres no ven que hacen cuando educan a tus hijos, pero que tu como persona de fuera, y como no lo has parido y no te ciega esa velo que parece ser se te pone delante y te hace ver ese niño como el más maravilloso del mundo aunque no sea para tanto, si que ves y piensas "cuando tenga hijos, yo eso no lo haré".
Entiéndase por ejemplo, cuando tu te pasas todas y cada una de las comidas sudando sangre para que las niñas estén sentadas mientras comen, pero cuando están ellos les dejan levantarse y hacer carreras de atletismo alrededor de la mesa, porque total "solo es un día", y no se dan cuenta de que es muy bonito tener que perseguir a las niñas cuando somos tres contra dos, pero cuando estoy yo sola con las dos, que se levanten a hacer el tonto no hace ninguna gracia. Y te sale una sonrisa malévola cuando se hartan de perseguirlas y se cabrean porque las niñas no les hacen caso, mientras dices eso de "conmigo eso no lo hacen".
O otro ejemplo seria cuando tu te pasas el día intentando que las niñas no chillen (sin razón). Y cuando están ellos es suuuuper gracioso que las niñas chillen. Claramente, cuando solo estas tres horas al día con ellas es graciosísimo, pero cuando te pasas ocho horas, como que ya no tanto.Y como en el caso anterior, como no les ponen limites en eso, a veces se les va de las manos, y cuando ves que han perdido el control, mientras las dos niñas están a ver quien más chilla mientras cenamos, te hartas y pegas un grito diciendo: "YO TAMBIÉN SE CHILLAR NIÑAS". Y del susto que se pegan las niñas se callan de golpe. Y te con una sonrisa de Joker les dices: "A que no os gusta que chille yo? Pues a mi tampoco me gusta que chilléis vosotras". Y bualá!!, los padres te miran con cara de "Gracias al cielo que estas aquí". Y tu piensas que todo eso es culpa suya, pero no se lo dices.
Y como estos hay mil ejemplos. Os dejo el link de del blog de Irene, donde podéis encontrar ejemplos extensos de esto.


Y esos son los puntos de vista del mundo au pair. Y si todos van a la par (que todos callen lo mismo a pesar de lo que ven), las cosas pueden ir bien, a pesar de estas "pequeñas cosas".

¿Alguna quiere añadir algo a este graaaaan análisis psicológico del asunto?


PD: ¿ Habéis visto el nuevo titulo del blog? Pues es un diseño elaboradísimo, que conlleva mucho esfuerzo, tiempo y ganas... Vamos, que lo hicieron las dos pequeñas con el Paint mientras se peleaban por el ratón del ordenador y yo intentaba poner paz. Después de media hora peleando, bien tenia que hacer algo con él.

domingo, 2 de septiembre de 2012

Tengo que confesar...

Lo he echo. No tengo perdón. Prometí que no lo haría y ahora me arrepiento. He caído muy bajo, esto seguro que es pecado (mortal) y seguro que va en contra de mi inexistente religión...

Tengo que confesar que hoy, a día 2 de septiembre, he salido a la calle con sandalias y calcetines. 

Habrá un antes y un después de esto en mi vida. También hay que decir en mi defensa que no encontraba ninguna de mis bambas por ninguna parte (aquí tenemos un duendecillo que al parecer nos las esconde). Por no decir que traía unos pelos de loca que para verme, un pantalón largo verde, una camiseta roja y un pañuelo azul y verde. Vamos, nada que envidiarle a Agatha Ruiz de la Prada. Pero a decir verdad... ¿Que au pair se arregla para cuidar a los niños? Yo si es de mañana, a veces ni siquiera me quito el pijama. 

Cuando veo esas fotos de las agencias, con chicas rubias bien peinadas, con ropa LIMPIA y un niño de dos años al lado, me sale una risita baja y lo que pienso es "esta tía no ha estado cerca de este niño JAMÁS". ¿Donde tiene sino las manchas de puré? ¿O el gotelé de baba en la camiseta? ¿O los pelos de loca después de que la niña quisiera jugar a peluqueras? Y enserio, ¿en que momento ha tenido tiempo/fuerza/ganas de maquillarse cual puerta a las 6 am para cuidar a un niño de 5 meses? 
Si yo ya tengo mi armario partido en dos: la ropa de salir a la calle, y la ropa de estar con las niñas. El primero no es nada especial, es ropa normal y corriente, pero el segundo es ropa con color a galleta, a puré de verduras, colores dudosos (ya sabéis, para que las manchas se vean menos), chandal a tutiplen... 

Y es que el otro día vi esta foto...

Y me dije: mira, una au pair de buena mañana.